Quienes somos     Mapa-web     Contacto                 Última actualización: desde el 24 de diciembre del 2021      FORO
 

Volcán Cotopaxi


Llorar a 5.897 metros de altura.

Miguel Ángel no podía habérnoslo contado mejor.

Enhorabuena.



Como parte de las vacaciones por Ecuador el grupo que formamos Olatz, Esti, Josune, Alfonso, Guille y un servidor, nos propusimos ascender a uno de los volcanes activos más altos del mundo, el volcán Cotopaxi, situado a unos 50km de Quito y que con 5.897m de altura domina los alrededores.

Comenzamos el lunes 15 de agosto haciendo una ascensión de aclimatación a un volcán cercano llamado Illinizas (Iliniza Norte 5.126 metros), paso una noche horrorosa en el refugio debido a la altura, por lo que me cojo el día siguiente libre y todo lo que hago es bajar del refugio, el resto del equipo suben sin problemas. Desde la cima de Iliniza Norte el Cotopaxi se divisa inconquistable.



El miércoles 17 de Agosto, después de dormir a pierna suelta a 3.900 metros, nos levantamos en las cabañas Paja Blanca ya en el parque Nacional Cotopaxi. Por la mañana el Cotopaxi aparece despejado.

Preparamos la mochila para la ascensión y a eso de las 13h cogemos una furgoneta hacia el parking de salida hacia al refugio. La furgo a duras penas puede con el equipaje, así que nos toca bajarnos a empujar en la subida, ver el reguero de aceite del embrague y hacer a pata lo que queda del recorrido salvando unos 200m de desnivel adicionales a los 300 que separan el parking del refu. En el parking nos ponemos la mochila y en menos de 2 horas ascendemos hasta el refugio Jose Rivas a 4.800m, la nieve aparece y nos pone sobre aviso de lo que nos podemos encontrar. Por la tarde el tiempo mejora y en lo alto se ve nuestro objetivo!

  
 
Ya en el refugio, nos comunican que no tenemos camas para dormir (¡maravilloso!), así que nos hacemos fuertes, ocupamos parte del comedor, unos colchones al suelo y a las 19h a intentar dormir algo. La aclimatación parece que ha funcionado y no tenemos síntoma alguno; eso si, es curioso que cuando duermes (intentar, mas bien) el corazón se pone a mil sin haber realizado movimiento alguno.
 
Para las 23h empieza a haber movimiento en el refugio y con la inquietud de la ascensión merodeando empezamos a ponernos en marcha. A las 12 de la noche ya estamos desayunando y antes de la 1 de la madrugada ya estamos en marcha. El ritmo que llevamos, dada al altura es muy lento, el grupo está respondiendo pero se nota en el ambiente la tensión. Como no se cómo se comportará mi cuerpo, me preocupo en beber agua a intervalos de media hora y comer cada hora.

La primera parte del recorrido es sobre roca y tierra hasta cerca de los 5.000m , a partir de aquí nos ponemos crampones y nos encordamos cada varón con su respectiva (yo con Olatz, Guille con Josune y Alfonso con Esti), y con un guia por cordada entramos en el glaciar.

Una ligera nieve hace aparición, aun así podemos comprobar la dificultad de por donde nos estamos metiendo: pasamos por seracs (grietas gigantes en el hielo del glaciar) que se nos encaran a la vez rigidos e inestables, trasmitiendo un dinamismo que obligan a respirar profundo, rezar y pasar de puntillas para no afectar a las fuerzas fuera de toda teoría física que soportan dichas preciosas formaciones. La ventisca sopla con mayor fuerza según avanza la noche. Además se une la inquietud que supone tener un volcán activo bajo tus pies. Supongo que éstas son las causas de que durante todo el recorrido se sienta un cosquilleo en el estómago no atribuible al hambre, más comúnmente denominado "canguelo del bueno".

  

El camino se hace muy largo, no ganamos apenas desnivel y Olatz y yo empezamos a preguntarnos cómo de peligrosa va a ser la bajada en caso de hacer cima. Después de los primeros rayos de sol, la nieve desaparece y nos deja comprobar de primera mano el escenario grandioso sobre el que caminamos.

Esti-Alfonso y Josune-Guille marchan más arriba que nosotros. Físicamente voy más o menos bien, pero anímicamente mal ya que se hace eterno y voy preocupado por Olatz.

A 200m de la cima, llevamos mas de 5 horas de marcha, el cansancio empieza a hacer mella y cada paso supone un esfuerzo titánico, obligando a hacer paradas para coger aire y descansar. Aquí es donde tengo que agradecer a Olatz el ultimo empujón que hizo, olvidando su extenuación para trabajar en equipo por el objetivo final.

Ya se ve a la gente en la cima, !!vamos que ya lo tenemos!!, rompo a llorar de emoción, Olatz se gira para atrás para comprobar si todo va bien. 5 minutos más tarde, consigue junto su compañero de cordada llegar a cima y se une a sus lágrimas.

  



Ya en cima, después de 6 largas horas de sacrificio, nos juntamos con Esti, Alfonso, Guille y Josune y nos fundimos en un abrazo de descarga de lágrimas y emociones. No existen palabras para describir las emociones vividas.

 
 
Tras disfrutar de las vistas y las fotos de rigor, comenzamos una bajada lenta por la peligrosidad inherente al entorno y el cansancio acumulado. Podemos apreciar la grandeza del glaciar que hemos ascendido en la oscuridad, disfrutando de las formas mágicas del hielo y la nieve, mientras volamos entre las nubes.

 

 

Y 11 horas más tarde volvemos al punto de partida, muy felices por haber conseguido en equipo subir y disfrutar de una experiencia que difícilmente olvidaremos. Todo el esfuerzo premiado por volver todos juntos de la cumbre. No hay mejor premio.

 

Muchas gracias Miguel Ángel por la crónica y las fotos. No os perdáis el álbum completo porque es una auténtica pasada:

Y recuerda que las montañas te esperan, con trail@42195.es!

 

 Patrocinadores

Casa Rural Quopiki

Qcesta

Booking

foro

YouTube

new york marathon